Uno de los grandes poetas españoles del siglo XX regresa con un poemario perfecto en su forma y duramente crítico contra los poetas que ahora ocupan la literatura.
Los dinosaurios de la poesía de Amanda Sorokin descubren un mundo de sensaciones íntimas que se vuelven fantásticas, empeñadas en enfrentarse al exterior, a veces irónicas pero siempre auténticas.
Una antología que se erige en una propuesta comprometida con el ingenio, llena de espacios luminosos que van trazando un camino de huellas personalísimas y estimulantes.
Según su autor, poesía contra la poesía. O tal vez no, quizá todo lo contrario. Tal vez se trate de una misión de rescate, una descarga de desfibriladores, un revulsivo.
Estos versos, que son conscientes de que los dioses saben mejor que nosotros lo que necesitamos, han obtenido II Premio de Poesía Ciudad de Lucena Lara Cantizani.
En 2006, Luis Alberto de Cuenca obtuvo el Premio Ciudad de Melilla por La vida en llamas, en donde se decanta claramente por el clasicismo poético, por la cultura como salvación ante el dolor que asola al mundo.